CUENTOS EN VERSO PARA NIÑOS PERVERSOS. (RESEÑA)

Cuentos en verso para niños perversos, es una recopilación de los cuentos clásicos infantiles, pero con un toque de sátira, escritos o reescritos por el cuentista, novelista, poeta y guionista británico Roald Dahl, e ilustrado por Quentin Blake.

Esta recopilación nos trae un lado un poco diferente y en ciertos momentos turbio de algunos de los cuentos de hadas clásicos, lo que ha hecho Roald Dahl, es dar ese giro que el espectador no espera en cada historia, dándole un toque perverso al desenlace y al final, pero con esa narración en verso.

Comenzando con la tierna Cenicienta, que como es de esperarse, si vive con su madrastra y sus feas hermanastras, pero ojo, ella no es la niña buena y sumisa, al contrario, es una niña rebelde y que sabe lo que quiere, por ello, la escena del baile, el encuentro con el príncipe, la prueba de la zapatilla y el final, son totalmente diferentes a lo que estamos acostumbrados.

Continuamos con Juan y las habichuelas mágicas, donde seguimos viendo al niño pobre que tiene que ir a vender su vaca para obtener algo de dinero, pero que, termina cambiándola por un par de habichuelas, que según el hombre que se las dio, son mágica y tras ser reprendido por su madre y arrojado las habichuelas crece un árbol gigante, donde en lo más alto se ve una gran fortuna, y es aquí donde comienza a discrepar la historia, pues el gigante hace de las suyas, y hay una lección para aquellos niños a los que no les gusta el baño.

La siguiente historia, es una de las más famosas y queridas por muchos, pero aquí, se retuerce un poco, pues Blancanieves no vive en la época de las princesas de antaño, sino más bien en una época contemporánea, en donde sí, seguimos teniendo una malvada con espejo mágico, que quiere terminar con la vida de la pobre Blanquita, y obviamente tenemos a sus compañeros, los 7 enanos, pero que en esta ocasión tienen otra ocupación y el final es algo que no muchos esperan.

Ricitos de Oro y los 3 osos, como olvidar este clásico, donde nos cuentan la historia de una familia de 3 osos que van a comer, pero al estar muy caliente su sopa, deciden ir a tomar un paseo para dejarla enfriar y es donde aparece la pequeña niña de cabello dorado, y es aquí donde la cosa se torna turbia, pues nos explican unas cuantas cosas sobre tomar las cosas ajenas y sus consecuencias.

Caperucita Roja, vaya historia que aún me deja con el ojo cuadrado y un poco pensativo, pues como sabemos el Lobo se disfrazas de la dulce y tierna abuelita de la pequeña niña, la cual acaba de ser devorada por el mismo lobo y que planea hacer lo mismo con Caperucita, pero no todo es como nos lo pintan en los cuentos, pues acercándonos un poco más a la modernidad, Caperucita sabe defenderse y demuestra que las apariencias engañan y en este cuento el final me parece un poco fuerte para edades muy tempranas.

Y para concluir con estos cuentos, nos vamos a topar con los 3 Cerditos o los 3 Cochinitos, como suele llamarse en ciertos lugares. El Lobo feroz tiene hambre y va caminando por el bosque en busca de algo que comer, cuando se topa con las casas de los Cerditos y decide que ellos serán su comida para ese día, los increíbles pulmones del lobo comienzan a hacer su trabajo en las 3 casas, pero como hemos dicho anteriormente, la modernidad nos acompaña en estas historias y el final es algo completamente diferente al que conocemos, pues hay una invitada especial de otra historia.

Como se podrán dar cuenta, les he contado el inicio de las historias clásicas, sin debelar las grandes sorpresas que Roald Dahl, no ha preparado a todos, porque este pequeño libro no solo es para los más pequeños, sino también para todo aquel que quiera dar un punto de vista diferente a las historias de los cuentos de hadas. La narrativa como ya bien dije es en verso y con un final algo perverso, pero eso es lo que le da un sabor especial, para que al final, sea algo fenomenal.

Recomendado para lectura ligera de los niños y los no tan niños, léanlo y me cuentas como les fue.