Biblioteca Vasconcelos

Que mejor manera de inaugurar el blog que con una anécdota de este domingo 14 de agosto de 2016.

El día de hoy 16 de septiembre del año 2016, decidí que tenía que ir a visitar la Biblioteca Vasconcelos del CONACULTA y ¿Por qué no? Sacar mi credencial de la misma para poder tener el servicio de préstamo a domicilio, así que me puse en marcha con mi original y copia de mi INE y comprobante de domicilio. El traslado hacia dicho lugar fue mus sencillo, pues solo tome el metro hasta la estación Garibaldi de la línea 8 e hice el transborde hacia Buenavista de la línea “B”, al salir en la estación Buenavista solo tuve que caminar unos cuantos pasos para encontrarme de frente con la entrada principal de la Biblioteca, aunque por fuera la estructura no refleja gran cosa, el interior es algo totalmente diferente.

Al entrar al recinto me encuentro con una vista general del edificio y de los niveles que se encuentran rebosantes de ejemplares de libros, la primera impresión fue de lo más maravilloso que he tenido el agrado de ver y conocer, los vigilantes te reciben con un saludo amable y el servicio de orientación muy gentil atiende todas tus dudas, ¿qué cómo lo sé? Pues obviamente tuve que hacer uso de este servicio pues por ser la primera vez ahí desconocía todo el terreno y como acceder a todos los servicios, primeramente pregunté donde tramitar la credencial de la biblioteca, y muy amablemente me indicaron el sitio donde podía hacer este trámite. Al llegar al lugar indicado para el trámite, una señora de lo más amable me pide mis documentos, que como ya mencioné son original y copia del INE y un comprobante de domicilio que pude ser un recibo de agua, luz, gas, o teléfono, estos requisitos para los mayores de edad, ya que para los menores de edad se requiere de la documentación del padre o tutor, y bueno, continuando con el relato, entrego mis documentos y me hacen entrega de una solicitud que tienes que llenar con tus datos personales (es necesario llevar tu propio bolígrafo), posteriormente te pasan a sentar para esperar tu turno para tomarte la foto que quedará registrada en tu archivo digital personal y en la base de datos de la biblioteca, pasados menos de 10 minutos desde que inicie el tramite me llaman y me sientan en una pequeña silla roja donde me toman la foto para el sistema, pongo mi firma en una pantalla digital y eso es todo, te entregan tu credencial, tu contraseña y tu NIP que son esenciales para el préstamo de los libros, como ven es un trámite muy sencillo y rápido de hacer, lo pueden realizar todos los días de la semana, de lunes a domingo de las 9:00 a las 19:00 horas y no tiene costo alguno.

Ya con mi credencial en mano me dispuse a buscar el libro por el cual decidí ir a hacer el trámite de credencialización, esto es aún más fácil de hacer, pues la biblioteca cuenta con muchas computadoras para que puedas hacer tu búsqueda, es muy sencillo, solo llegas al pc y tecleas ya sea el nombre del libro o del autor y te saldrá un desplegado con todos resultados de tu búsqueda, seleccionas el que estás buscando y te parecerá su ficha técnica con el número de identificación del libro, posteriormente en el mapa que está pegado en la pared justo enfrente de las computadoras chequeas en que piso, zona  y sección  en la que está el código de tu libro y listo, puedes ir a buscarlo. Ya identificado tú libro con el código y el piso puedes acceder a los mismos por las escaleras o por los elevadores, si bien hay que decir que la biblioteca impone muchísimo, también hay que dejar en claro que los pasillos me dan un poco de pánico, pues el edificio y las estanterías están flotando, sostenidas de manera increíble por mucho acero y vidrio, sí, vidrio, pues todo el piso de todos los niveles y pasillos es vidrio, lo que hace que gente como yo que tiene vértigo mire solo al frente y vaya todo el tiempo sostenido del barandal. El acomodo de las secciones es preciso y fácil de entender, aunque yo me di mi tiempo para buscar y disfrutar de todos los niveles y el olor a libros que solo una gran biblioteca tiene.

Cabe mencionar que este espacio es sumamente amplio y en el no solo puedes hacer uso de los libros, sino que también puedes disfrutar de los libros en las modernas y cómodas salas de lectura que se encuentran distribuidas por toda la biblioteca, del mismo modo puedes salir a respirar aire puro o a leer en sus bellos jardines y balcones en los cuales también puedes ver a muchos chicos ensayando sus rutinas coreográficas, de igual forma puedes hacer uso de las computadoras e internet ilimitado que ofrece la biblioteca, así como tener la posibilidad de llevar tu propio pc portátil e instalarte a estudiar o trabajar en las mesas equipadas con luz individual para cada lugar, conexiones alámbricas a internet y enchufes eléctricos para que no te quedes sin batería, sin olvidar las diferentes salas con materiales específicos para cada cosa, la sala de música donde puedes practicar con tu instrumento sin ser molestado e incluso la biblioteca te puede prestar un instrumento si no llevas el tuyo, la sala en Braille, la sala de lenguaje a señas, el auditorio y la sal especializada y exclusiva para los más peques en la sección infantil y los múltiples cursos, talleres,  círculos de lectura, conciertos y actividades que ofrece este recinto, todos estos servicios son gratuitos y los pueden usar en el momento en el que gusten o estén disponibles, pues la demanda de todos estos es grande.

Volviendo a mi visita, encontré rápidamente el libro que deseaba y que tanto me habían recomendado leer, al fin tenía en mis manos un ejemplar de “El Club de los Perdedores” de la escritora mexicana Lorena Amkie (de él cual haré una reseña al terminar de leerlo) , ya tenía 2 partes completadas de mi misión este día, mi credencial de la biblioteca y el ejemplar que deseaba, era hora de llevarlo a casa, pero en ese momento surgió otra duda, ¿cómo y dónde solicito el tramite?, pues bueno, nuevamente me acerque a uno de los trabajadores de la biblioteca, que en este caso era uno de los bibliotecarios que ordenan los libros en las estanterías y le pregunte por el trámite para el servicio, a lo que me respondió amablemente y de verdad que fue amable pues me señalo paso a paso todo lo que tenía que hacer, me indico que en la planta baja había unos módulos con un escáner y una pantalla a los que se les denomina “autoprestamos”, me indico que primeramente tenía que tener a la mano tanto mi credencial de la biblioteca como mi NIP, posteriormente pasar por el escáner el código de barras de mi credencial y me aparecería un teclado en la pantalla táctil de la parte de arriba donde tenía que ingresar mi NIP y después pasar el código de barras que viene pegado en la parte posterior del libro, aclarando que es el código que viene en la etiqueta puesta por la biblioteca y donde vienen también los datos del libro, posteriormente y  por último en la pantalla aparecería un mensaje donde diría imprimir comprobante, pulsara esta opción esperara a que dicho ticket saliera, ya que con ese ticket y el libro en cuestión el vigilante de la entrada me permitiría la salida con el ejemplar, así que me puse en marcha al primer piso, obviamente por el elevador puesto que estaba yo en el piso 4, al llegar al primer piso me encuentro a unos cuantos pasos la máquina de autoprestamo, algo curiosa y bonita por cierto, un cubo de madera que en la parte superior tiene un corte en forma de “V” y sobre ella un escáner que apunta a uno de los lados de la V y donde se puede ver el láser rojo por donde hay que pasar los código, y sobre el escáner una pequeña pantalla táctil bastante nueva o muy bien cuidada por cierto. Ya con todo lo necesario a la mano y con el procedimiento adquirido por el amable bibliotecario, procedí a solicitar mi préstamo, seguí paso a paso las indicaciones y en menos de 15 segundos mi ticket salía con mis datos y los del libro en cuestión, diciendo que estaba a préstamo a domicilio y la fecha en que lo tengo que devolver, que en este caso es un plazo de 7 días y con la opción de 2 ampliaciones de 7 días más cada uno, es decir un máximo de 21 días, concluido lo que tenía que hacer y haber disfrutado de todo el recinto, me dirigí a la salida con mi libro en mano, donde un vigilante aguarda frente a una gran pantalla y un escáner, te solicita tu libro y tu ticket, escanea nuevamente el código de barras de la biblioteca que se encuentra en el libro y para mi sorpresa aparece en pantalla enorme mi fotografía y nombre y debajo el libro que solicite con unas letras en color verde y de un tamaño bastante grande, que dicen préstamo, el vigilante me entrega mi ticket y el libro y me agradece por visitar la biblioteca.

Como pueden darse cuenta, este lugar parece sacado de un cuento de hadas para los amantes de la lectura y de la cultura en general, pues, tanto el acervo como las actividades están a la orden del día, ofrece una amplia variedad de actividades y servicios para todo el público y de manera gratuita, a mi parecer este tipo de lugares no deben de ser desaprovechados por nadie, pero aún más importante, todos los que hacemos uso de ellos debemos de procurar su conservación, pues los ejemplares no son nuestros y hay que respetar el material que será útil para otras personas en el futuro.

Por otra parte, de verdad, de verdad, de verdad, visiten este sitio, créanme que no se arrepentirán, y de igual forma, anímense a tramitar su credencial, como ven es super rápido y muy, muy sencillo y por todo lo que nos ofrecen vale mucho la pena, solo recuerden devolver en la fecha marcada los libros y si requieren una ampliación del mismo realizarlo por internet, si quieren consultar más información de la biblioteca, los servicios, cursos y el trámite de credencialización, les dejo la página web de este hermoso sitio, esperando que se den un tiempo para visitarlo y juzgar por sí mismo todo esto que les cuento, pues como verán es mi opinión y cada uno tiene la propia y decide si le gusta o no, pero en lo personal es un lugar que les recomiendo ampliamente.

Biblioteca Vasconcelos:

http://www.bibliotecavasconcelos.gob.mx//index.php